Para adoptar una decisión coordinada, los Estados miembros de la Unión Europea,
junto con la Comisión y la Agencia de Ciberseguridad de la UE (ENISA), evaluaron
durante 2019 los riesgos y vulnerabilidad de las redes de quinta generación.
En este documento de trabajo se analiza la posición europea respecto a estas temáticas.