En 1930 en la ciudad de Buenos Aires con la inauguración del Teatro del Pueblo dirigido por Leónidas Barletta se sientan las bases de lo que será el teatro independiente en Argentina. A partir de allí se establecen una serie de principios que definen una particular concepción de la relación entre teatro y política que serán constitutivos de esta actividad. En Rosario, en el año 1942 se conforma el primer grupo independiente dando inicio a un largo camino que se consolidará a lo largo del tiempo con la aparición de nuevos grupos que impulsarán este tipo de teatro, manteniéndose en sintonía con los postulados heredados de la tradición independiente. Se afianzará una forma de entender lo teatral atravesada por fuertes componentes éticos, que definirán su carácter sacrificado y heroico. La producción de Juan Hessel que se inicia en el año 2001 con el estreno de la obra “Almas Fatales, melodrama patrio” y se consolida con “Naturaleza Muerta” en el año 2004, emerge en la escena rosarina para proponer una nueva articulación entre teatro y política que será novedosa y permitirá pensar otro camino para el teatro local.