¿Por dónde comenzar si hemos de abordar la historia de la traducción en sus más remotas manifestaciones? ¿Y por qué? Cualquier campo de estudios de por sí es tan vasto, tan inconmensurable, y sus orígenes tan remotos, tan difíciles de conocer en su totalidad, tan variados y dispersos, como fácil es leerlo solo con nuestros ojos contemporáneos, trasvasados de actualidad, limitados y sojuzgados por esta simultaneidad que nos inunda, rebasa y empuja hacia el conocimiento obligado del futuro que está allí, al alcance de nuestras manos, que es nuestro, a condición de descartar más o menos elegantemente todo lo antiguo por vetusto, lo “pre-científico” (léase no-científico, lo que no es como nosotros), lo superado. Quizás la pregunta para hacerse sea: ¿cómo y en qué medida ayuda hoy el estudio de las más lejanas y remotas expresiones y reflexiones sobre/de la traducción a quien traduce (quizás, también, más allá de su labor traductora, esto es, en su vida diaria)?
Palabras clave
Historia de la traducción, Teoría de la traducción, labor traductora