La pobreza es, y por mucho tiempo ha sido, una cuestión insoslayable para la
mayoría de los países, permitiendo caracterizar la morfología de cada sociedad. Pero
cobra una mayor importancia, fundamentalmente para los de nuestra región, una de las
más desiguales del planeta. Argentina forma parte de ese conjunto de países donde la
pobreza ha adquirido, en los últimos tiempos, nuevas dimensiones y magnitudes, así
como una gran significación y relevancia política. En consecuencia, los datos estadísticos
sobre los niveles y características de este problema se transforman en valiosos insumos
para la formulación y evaluación de políticas públicas tendientes a superarlo.
La situación en el nivel subnacional —provincial y municipal— no dista mucho de
lo anteriormente planteado. Los municipios, junto con las organizaciones del territorio —
la Universidad pública entre ellas—, destinan esfuerzos para poder conocer y abarcar de
manera adecuada el fenómeno y, de tal modo, articular ideas y proyectos con los niveles
superiores del Estado, en pos de intervenir sobre sus efectos sociales y problemáticas
asociadas.