El presente ensayo aborda la problemática “borderline” desde una perspectiva psicoanalítica. Esta “estructura” ha sido pensada desde los comienzos como ocupando un lugar intermedio entre neurosis y psicosis. Es en el concepto fundamental de “borde” que se introduce la diferencia de abordaje. Este deja de ser entendido en términos de “ubicación” y pasa a ser puesto en cuestión. Se plantea, como hipótesis, que lo propio de estos sujetos se resume en: un des-borde estructural y un des-borde como modalidad de retorno. La argumentación desplegada da cuenta de tres puntos clave: una diferenciación específica de sus “manifestaciones psicopatológicas”; un recorrido por los tiempos estructurantes del psiquismo; y una especificación sobre los bordes de los se trata. Por último, se concluye hallar, en estos sujetos, algo fallido en los tiempos de inscripción que hacen a la estructuración psíquica, y una relación directa entre eso fallido y la ausencia de bordes.