Hace casi dos décadas, deSignis editaba un número doble sobre las transformaciones
del discurso político en la esfera pública. “¿Para qué sirve analizar
al discurso político?” –se preguntaba entonces Patrick Charaudeau, figura
mayor del análisis del discurso y de la Semiótica del discurso político.
Veinte años después, la revista interroga las intersecciones entre actores políticos,
nuevos medios y públicos. ¿Por qué el discurso político ha fascinado no sólo a la Semiótica,
sino también al análisis del discurso, a la sociología política y ahora a los Web Studies y a
la retórica post–perelmaniana? Fuertemente ligado a la temporalidad –en la interpretación
de un “pasado” y en la proyección de un futuro– convive en la memoria colectiva que
contribuye a forjar y con la producción de un “presente” a través de las redes sociales, al
punto que es legítimo preguntarse si puede existir la comunicación política y su discurso
sin la Web 2.0.