Examinando por Autor "Ritvo, Juan"
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Ítem Acceso Abierto Hipótesis de una relación posible. Lingüística – Retórica – Psicoanálisis(2010-10) Fignoni, Fernanda; Ritvo, Juan; Múgica, NoraLa presente investigación tiene por meta analizar las relaciones entre Lingüística, Retórica y Psicoanálisis a partir de la hipótesis que formulo en cuanto a que Lingüística, Retórica y Psicoanálisis es el enunciado de una relación necesaria en la que la propuesta teórica lacaniana acerca del Psicoanálisis freudiano y sus posteriores reformulaciones, recurre a la Lingüística y a la Retórica – entre otras ciencias - en la adopción de conceptos, denominaciones, y paradigmas para el armado de su cuerpo teórico. Quiere decirse que no se trata de una interdisciplinariedad en términos de una interrelación entre disciplinas ni del surgimiento de una nueva disciplina a partir del entrecruzamiento de las otras dos, sino de los aportes de la Lingüística y la Retórica para la constitución de los ámbitos teóricos del Psicoanálisis. Comprendiendo “aportes” en términos de una transmisión que hace posible – por la vía del equívoco en la lectura - la constitución de la disciplina psicoanalítica. Transmisión que inaugura la diferencia radical entre el lenguaje de la Lingüística para los lingüistas y el lenguaje de la Lingüístería para los psicoanalistas. La hipótesis que esta investigación plantea tiene como categorías de análisis a la metáfora y a la metonimia entendidas no como categorías universales ni absolutas sino como categorías construidas en marcos teóricos específicos dentro de los cuales obtienen su conceptualización. Tal es el caso por ejemplo, de lo que ocurre con la categoría de sujeto, la cual es un indicador teórico del campo de análisis en el que se define. Son muchos los sujetos de los que se dice y se teoriza, por ejemplo, nos encontramos con el sujeto del inconsciente freudiano, el sujeto discursivo de Benveniste, el sujeto biológico (hablante/oyente) de Chomsky, el sujeto sociológico de Bajtin, el sujeto cultural de Cross, el sujeto comunicacional de Jakobson, el sujeto del pensamiento en Saussure. Así pues, consecuentemente, las categorías lingüísticas que se retoman en Psicoanálisis (sea para tomarlas, reformularlas ó subvertirlas) no son categorías únicas y absolutas sino categorías construidas en los marcos teóricos lingüísticos específicos y pertinentes dentro de los cuales han sido conceptualizadas. El mismo caso, para las retóricas. Si bien nuestra hipótesis sostiene que la propuesta teórica lacaniana en lo tocante al tratamiento de la metáfora y de la metonimia no hubiese sido posible o por lo menos hubiese sido otra de haber prescindido de las teorías lingüísticas y retóricas, creemos interesante realizar un recorrido por diferentes conceptos que dichas categorías han ido adquiriendo dentro de los marcos teóricos tanto lingüísticos como retóricos, para arribar finalmente a conceptualizarlas conforme a la teoría psicoanalítica lacaniana. En términos generales, es bien conocido el hecho de que en la constitución de una ciencia y en los desarrollos posteriores, se produce un entrecruzamiento entre diferentes disciplinas en el que una de ellas adopta elementos básicos de la otra, sea por estar ésta más consolidada, sea por ofrecer sistemas con mayor grado de universalidad, o por aportar evidencias del funcionamiento de los mismos, - sólo por mencionar alguno de los factores intervinientes -. El cuadro de situación es que la disciplina fuente ofrece un conjunto de elementos teóricos (conceptos, denominaciones, y evidencias) y de este préstamo suelen ser aceptadas las denominaciones ya estabilizadas pero no tanto así, los conceptos a los que remiten, porque al integrarse a un nuevo paradigma surge la necesidad de resemantizarlos, de redefinirlos. En el caso particular de la Lingüística, vemos cómo desde el momento en que se constituye como una ciencia independiente toma aportes de otras disciplinas -como la lógica, y las matemáticas - y realiza un movimiento semejante al ya descrito de adecuación de conceptos y nombres; define de este modo un corpus de elementos teóricos delineados a partir de la delimitación de un punto de vista. Ubicándonos desde la perspectiva psicoanalítica, Lacan ha procedido de una manera similar trasladando de las Ciencias del Lenguaje – entre otras - nociones y denominaciones y procediendo a una reubicación en su contexto de investigación creado. Habitualmente, nos encontramos con que los textos de teoría psicoanalítica hablan de la Lingüística empleando el término en singular, suponiendo implícitamente que existe un tipo unificado y homogéneo de discurso para la ciencia del lenguaje y que por lo general, coincide con la Lingüística Moderna y Estructuralista de Saussure. Por lo que, si bien se habla en general de la Lingüística como teoría única acerca del lenguaje, es necesario realizar un desplazamiento desde la concepción de “La Teoría Lingüística” a la de “Las Teorías Lingüísticas”. Es decir, necesidad de quebrar una vieja concepción acerca de que la Lingüística es sólo una hacia la asunción de que se trata de las teorías lingüísticas y que sólo desde esta perspectiva, es factible interrogarse acerca de la relación entre “Lingüística y Psicoanálisis”. Por tal fin, sumamos las teorías lingüísticas de Jakobson y de Benveniste, así como las teorizaciones producidas por Austin, Searle y Todorov que sin ser del campo estrictamente lingüístico han planteado teorías acerca del lenguaje.Ítem Acceso Abierto La política de la cura psicoanalítica: práctica de una ética de la interpretación(2007-10) Morello, Aldo; Ritvo, JuanCuando se pone en juego el término política en psicoanálisis, generalmente se hace referencia a todo el aparato de la industria cultural: las escuelas, congresos, encuentros, ateneos, obturando la pregunta por la dimensión política del psicoanálisis, en el sentido de una política propia. Esta tesis propone investigar la dimensión política de la cura psicoanalítica y las consecuencias de su ética, teniendo fundamentalmente en cuenta lo específicamente clínico, para elucidar qué se entiende por política de la cura. El concepto de política está ligado a la dirección de la cura. En su Escrito La dirección de la cura y los principios de su poder Lacan define al deseo del analista como su “política”, a la transferencia como su “estrategia” y a la interpretación como su “táctica” – siguiendo la caracterización que Clausewitz utilizara para referirse a la guerra. El propósito de Lacan es situar la interpretación al nivel de una táctica específicamente clínica, es decir un procedimiento o maniobra de la dirección de la cura. Así como Freud ha escrito que la anatomía es el destino, se podría decir que el inconsciente es la política, reflexiona Lacan y se desplaza hacia lo que es, por antonomasia, pasible de interpretación: el síntoma, la formación del inconsciente. En el seminario De un discurso que no sería de la apariencia Lacan señala lo siguiente: “Que el síntoma instituya el orden por el cual se revela nuestra política, ahí está el paso que se ha franqueado. Implica, por otra parte que todo lo que se articula de este orden sea pasible de interpretación. Es por lo cual se tiene razón al colocar al psicoanálisis en el más alto grado de la política. Y esto podría no darle descanso a la política y a todo lo que allí se hace, ¡si el psicoanálisis se revelara más advertido!”. Entonces, el síntoma instituye el orden por el cual se revela la política del psicoanálisis, exigiendo la necesidad lógica de construir el inconsciente como discurso y articular a partir de ese orden la posibilidad de interpretación. Por lo tanto, si el inconsciente es la política, la interpretación, como acto de lectura, también lo es. Partiendo de este punto es razonable ubicar la dimensión política del psicoanálisis. Se puede afirmar que la acción del analista es política en tanto arte de lo posible. Esto no quiere decir que simplemente se hace aquello que se puede, sino que se trata de cómo se produce lo posible mismo. En otras palabras, se apunta a la posibilidad misma engendrada por el acto de lectura. Por otra parte, si hay política de la cura es porque no es factible ampararse en ratio científica alguna que dispense al analista de los riesgos de una lectura. Esto fundamenta al discurso analítico como práctica ética de la interpretación. Se trata de explorar qué política del discurso practica o conviene al psicoanálisis para que pueda valorarse el alcance ético de su decir, en su vínculo con lo real y con las características de su objeto; investigar qué política sostiene el psicoanálisis en relación al saber, a diferencia de otros discursos, que apuntan a un ideal de transmisión universal y a una estandarización del saber. El acto analítico tiene la estructura de un decir y se especifica por instaurar Otro lugar. Esta instauración requiere del dispositivo analítico que comprende la asociación libre, la interpretación, la transferencia y la neutralidad del analista. En estos puntos se resume la estructura misma de la experiencia analítica. Sin embargo es preciso articular el modo en que la acción del analista se liga al dispositivo, cómo interviene el deseo del analista, para dar cuenta de la política del psicoanálisis. Esta noción, el deseo del analista, es central para el ejercicio del psicoanálisis y por ello es necesario pensarla y analizarla como fundamental en la dirección de la cura, teniendo en cuenta que, en el modo en que se despliega su originalidad, el acto psicoanalítico adquiere toda su importancia. Teniendo presente que la promesa de felicidad es algo que aparece como imprescindible en el mundo contemporáneo y que el ejercicio mismo de la política se ha convertido en una manera de gerenciar la felicidad, es preciso situar cómo el analista se posiciona frente a la demanda, ya que la felicidad no sólo la reclaman los gobernados a sus gobernantes, sino también los analizantes al psicoanalista. Mientras que la política moderna pretende regular las formas de goce de cada cual en relación con lo colectivo, el psicoanalista se abstiene de dirigir al sujeto, no renunciando por ello a dirigir la cura. La cuestión ética y el tratamiento del goce será entonces uno de los elementos que permitirá distinguir la política del psicoanálisis de la política en general. En este sentido, política, clínica y ética son inseparables para el psicoanálisis y el presente trabajo intentará despejar conceptualmente estas dimensiones para poder luego reconocer su articulación.Ítem Acceso Abierto Traducción y psicoanálisis(CEI Ediciones, 2023-04-25) Piemonti, María Gabriela; Kuri, Carlos; Gonella, Juan; Vassallo, Sara; Ritvo, Juan; Corestein, Cintia; Casero, Agustina; Loose, María Sara; Espinosa, CintiaEn homenaje a los y las traductoras de todo el mundo y de todos los tiempos —en las vísperas de un nuevo 30 de septiembre, su/nuestro día internacional—, con mucho orgullo presentamos nuevamente una propuesta inédita —hasta donde sabemos— para dialogar sobre la traducción, sobre los y las traductoras y, en esta oportunidad, con el psicoanálisis. Teniendo como objetivo problematizar nuestro trabajo cotidiano, así como las lecturas de lectores de originales y de lectores de traducciones, y convencidas de la necesidad de realizar actividades conjuntas con disciplinas tradicionalmente no vinculadas a la traducción interlingüística, en 2020 comenzamos una serie de webinarios, hoy disponibles en el canal de YouTube de la Universidad Nacional de Rosario (UNR): “Traducción y Sospecha”1, “Traducir a Amanda Gorman”2, “Traducción y Filosofía”3, “Traducción y Derechos Humanos”4 y “Traducción y Psicoanálisis”5, para este último nos acompaña la Maestría en Psicoanálisis de la Facultad de Psicología de la UNR, dirigida por Carlos Kuri. Claramente no pretendemos aquí agotar la relación entre traducción y psicoanálisis, sino más bien abrirla, comenzar a dialogar, ese es precisamente nuestro propósito: sacar la traducción del tradicional ámbito de la lingüística contrastiva y de la gramática comparada —donde se la ha anquilosado— para llevarla donde siempre estuvo en la práctica y en la Traductología —desde Cicerón en adelante—: a la interdisciplina, un universo complejo, dinámico e inabarcable, muchas veces huidizo e incierto pero formidable. Para esto, tendremos bien presente el hecho de que todos y todas hemos crecido desde nuestra más temprana infancia entre traducciones y hoy desarrollamos nuestras actividades, desde las más triviales y cotidianas hasta las académicas y científicas, de la mano de traducciones o en permanente traducción. Con Carlos Kuri, Juan Gonella, Sara Vassallo y Juan Ritvo hemos comenzado a conversar hace algún tiempo sobre la relación entre traducción y psicoanálisis, hemos intercambiado materiales, lecturas, perspectivas, historias, observaciones, experiencias y anécdotas. Es un honor y una gran satisfacción poder compartir ahora por escrito esos intercambios y aprendizajes, con los que, en lo personal y en lo institucional, nos hemos enriquecido.