El presente artículo se plantea indagar acerca del decir transexual en la clínica. Transexualismo, transgénero o empuje-a-la-mujer, no son conceptos, son una manera
de hablar de la clínica, la que llevamos adelante en Hospital Escuela.
Se trata solamente de poder estar fieles a la clínica y escuchar lo que acontece en
nuestra sociedad. Freud ha dicho que la teoría no se formula más que a posteriori y a
título provisorio. Entonces, la clínica como territorio del decir trans hace a la salida de
las clasificaciones psiquiátricas -de donde proviene el término transexualismo- así como
de las propuestas lacanianas, las que han tenido una transmisión dogmática y religiosa.
Por su parte Lacan equivocó sus apuestas, arrojando a los transexuales al campo de las
psicosis o las pasiones.
Es preciso leer la clínica pluralizando el término “transexualismos” ya que se trata
del decir singular, donde, en ciertos sujetos no hay delirio en juego y es bien oscilante la
demanda quirúrgica de readecuación u hormonización. Entonces, hace a la variabilidad
del deseo mismo, en cada momento de la existencia, según los amores, las circunstancias
psíquicas, etc.
Es preciso escuchar este problema psíquico verdadero sin moralización, sino haremos
otra cosa y no analizar.