2018-03-012018-03-012016-071853-8819http://hdl.handle.net/2133/10731Asia constituye el continente más grande y el más habitado del planeta reuniendo al 60 % de la población mundial. Tierra de enormes contrastes alberga históricamente una multiplicidad étnica, lingüística, religiosa y política a lo cual se han sumado, en años recientes, una serie de procesos contradictorios: potencias emergentes conviven con agudas desigualdades socioeconómicas. Igualmente, de un mismo continente provienen la doctrina gandhiana de no violencia, la visión pacifista nipona que aboga por la ausencia de ejército nacional junto con el virulento extremismo del yihadismo.Todo ello podría, no obstante, englobarse en un denominador común asociado a la imagen de turbulencia: siguiendo una trayectoria sinuosa y en forma de torbellino, Asia se ha convertido en el nuevo centro de gravedad mundial. Esta turbulencia puede ser símbolo de destrucción pero también puede significar un despertar con el advenimiento de nuevas ideas y por ende, de una nueva forma de pensar el mundoapplication/pdf6-12spaopenAccessAsiaSociedadPolíticaRegionesAsia : turbulenciaarticleAutorAtribución – No Comercial – Compartir Igual (by-nc-sa): No se permite un uso comercial de la obra original ni de las posibles obras derivadas, la distribución de las cuales se debe hacer con una licencia igual a la que regula la obra original